No me leas cuando
sea rosa,
bésame cuando sea espina.
Voy a quererte por
ósmosis,
lento , suave, a gotas,
penetrándote al alba,
cruzando toda membrana imaginaria
para que mis células
se confundan con las tuyas…
y en esa transfusión morbosa
nacerán colibrís de nuestras bocas,
quedaremos saciados,
sin una sola caricia de manos.
*María Cayo C
No hay comentarios:
Publicar un comentario